Un espacio de trabajo tiene que ser funcional pero a la vez acogedor. El orden es fundamental, pero también la comodidad y el bienestar.
Contar en casa con una habitación exclusiva para ello es un gran privilegio. Si tienes la suerte de tener ese espacio y quieres optimizarlo no debes pasar por alto éstas claves que en el caso de éste despacho se cumplen con creces. Ésta vez nuestra tarea era darle al despacho un toque personal y cálido.
- Espacio de almacenamiento: Resuelta con una pared con estanterías a medida
- Mesa de trabajo amplia y silla ergonómica
- Luz natural graduable mediante cortinas de lamas verticales según las necesidades de cada momento, para proteger la intimidad e impedir reflejos en las horas de sol. Su mecanismo permite tanto la orientación de las lamas como la total recogida horizontal de la cortina, una combinación de la sobriedad y elegancia de los paneles japoneses con la opción de regulación de la luz de las lamas..
- Iluminación artificial como luz de apoyo: Lámparas de mesa para iluminación puntual de tu trabajo y otro punto de luz general mediante lámparas colgantes o de pie.
- Colores neutros en el espacio conjunto para dar sensación de amplitud y toques de color en detalles concretos para restarle frialdad y añadir tu toque personal.